A más de un año de su inauguración, la Central de Autobuses del Sur (CAPU Sur) no ha alcanzado la afluencia esperada de pasajeros. Pese a la inversión millonaria destinada a su construcción, el movimiento en la terminal es escaso y gran parte de sus locales permanecen cerrados.
De acuerdo con las proyecciones iniciales, la central debía operar con hasta 150 corridas diarias y movilizar entre 3 mil y 4 mil pasajeros. Sin embargo, la realidad dista mucho de esos números: los viajeros prefieren trasladarse hasta la CAPU Norte, donde existe mayor oferta y conectividad.
En un recorrido por la zona se constató que el servicio de taxis es mínimo, con apenas unas cuantas unidades disponibles al día, y que la mayoría de los espacios comerciales continúan sin operar. Esta situación ha llevado a que la terminal sea considerada por algunos sectores como un proyecto sin rumbo claro.
Autoridades de la Secretaría de Movilidad y Transporte han reconocido la falta de impulso y aseguraron que trabajan en medidas para reactivar la CAPU Sur, con el objetivo de que cumpla su propósito original: convertirse en un punto estratégico de movilidad para la zona sur de Puebla.
