
Cuando deporte, educación y política se entrelazan con visión, suceden cosas como esta: Puebla será sede de los Juegos Deportivos Nacionales Escolares 2025, y no es casualidad. La elección no solo responde a infraestructura o logística, sino a una voluntad política clara.
El secretario de Educación federal, Mario Delgado, lo dejó claro: el gobernador Alejandro Armenta es un convencido de que la educación se fortalece con disciplina y competencia sana. Y el director de CONADE, Rommel Pacheco, añadió que la deuda histórica con Puebla quedó saldada.
Pero más allá de los discursos, el anuncio trae consigo un mensaje: el deporte escolar importa, y Puebla lo entiende. Al albergar a más de 21 mil estudiantes atletas, el estado se coloca no solo como sede, sino como símbolo del nuevo enfoque de gobierno que promueve Claudia Sheinbaum: salud, alegría y desarrollo integral para la juventud mexicana.
Y en voz de una joven poblana, Renata Muñoz, se resume el espíritu del evento: “Esta será una experiencia inolvidable”. Lo será. Porque detrás de cada carrera, cada pase y cada salto, estará latiendo la promesa de un México más fuerte.



