En 30 estados castigan con cárcel a quien contagie VIH

En un escenario donde al menos 360 mil personas viven con VIH en México –de acuerdo con el Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH y el sida (Censida)–, 30 de los 32 códigos penales estatales y el Código Penal Federal establecen que una persona con el virus puede ser acusada por poner en riesgo la salud de otros y terminar en la cárcel.
En Baja California, Coahuila, Nayarit, Oaxaca, Puebla, Sonora, Tamaulipas, Veracruz, Yucatán y Zacatecas quien padezca una infección de transmisión sexual (ITS) y tenga conductas susceptibles de considerarse “peligrosas para la salud de otra persona” puede ser castigado. En Nayarit y Zacatecas, además, es sancionada la mujer que “con alguna enfermedad o sífilis” amamante a un bebé.
En 17 estados de la República las sanciones impuestas a una persona por la presunta transmisión de una enfermedad aumentan hasta 10 años de prisión si la persona vive con VIH, al considerarse un “mal incurable”. Y en las leyes de 11 entidades, la transmisión de VIH se equipara a un crimen de lesiones o lesiones calificadas.
En Baja California, Baja California Sur y Guerrero la detección de VIH es motivo para no poder contraer matrimonio. El código civil de estos estados obliga a presentar certificados médicos que aseguren que los contrayentes no padecen alguna ITS como sífilis o alguna enfermedad incurable.
Aguascalientes y San Luis Potosí son los únicos estados que no penalizan el peligro de contagio, de acuerdo con el estudio “La legislación mexicana en materia de VIH y Sida. Su impacto en las personas viviendo con VIH”, publicado por la Red Mexicana de Organizaciones contra la Criminalización del VIH, que agrupa a 40 colectivos en el país.
Este documento, pionero en México, analiza los códigos penales, los códigos civiles, las recomendaciones derivadas de comisiones de derechos humanos y las leyes que fomentan la discriminación y el estigma hacia quienes viven con el virus.
Además, la Encuesta Nacional sobre Discriminación resalta que el grupo poblacional de personas con VIH es uno de los sectores con más altos índices de segregación en el país. Tan solo en la Ciudad de México las personas con VIH están entre los 10 primeros grupos de ciudadanos donde se percibe mayor discriminación.
DENUNCIAN LEY ARCAICA
La figura de peligro de contagio es un problema, precisa el periodista y especialista en VIH, Leonardo Bastida, pues no está respaldada por evidencia científica, sino en presuposiciones.
“Muchas de las personas con VIH que conocen su diagnóstico pueden ser muy saludables, pues reciben tratamiento y no podrían ser una fuente de infección. Las personas con un tratamiento de seis meses pueden volverse indetectables, lo cual significa que no puede transmitir el VIH porque la concentración del virus en su sangre es mínima”.
Bastida también precisa que la categoría de “peligro de contagio” no se ha actualizado y que esta figura ya tiene más de un siglo en vigor, pues al principio estas sanciones surgieron como medida sanitaria en contra de la sífilis, pero que ahora ya están muy rebasadas por las investigaciones científicas sobre el tema.
“No hay un interés por parte de las autoridades para revisar las leyes, a pesar que ya se tiene más de cinco años denunciando”.
EL VIH NO DEBERÍA DAR MIEDO, LA DISCRIMINACIÓN SÍ
Miguel usa un megáfono para invitar a los transeúntes a realizarse una prueba gratuita de VIH, hepatitis y sífilis. Él forma parte de la jornada de salud que promueven las autoridades municipales de Ecatepec.
Es un joven de 30 años, carismático y de actitud amable. Desde hace menos de dos años colabora en la dirección de diversidad y atención a las poblaciones LGBTTTIQ+.
El 24 de abril de 2017 en la clínica Condesa, ubicada en la Ciudad de México, le dijeron que vivía con VIH. Aunque en ese momento sabía que el virus no era una sentencia de muerte, por el estigma y desinformación que existe alrededor del tema entró en estado de shock.
“Cuando me pongo a pensar en eso, me doy cuenta que no fue tanto la noticia o el diagnóstico. Fue más la carga emocional que yo sentí: que había fallado como hijo, como persona, como adulto. Si no fuera por el estigma creo que todo esto sería más llevadero”.
El miedo de Miguel no era infundado: el estigma y los prejuicios se han traducido en criminalización de quienes viven con VIH.
Otro caso es el de Juan, que en 2021 fue detenido en la Ciudad de México tras presuntamente ocultar a su novia que tenía VIH. El acto fue tomado como “la posible comisión del delito de peligro de contagio”, ocasionando su traslado al Reclusorio Norte de la capital.
El próximo 1 de diciembre se conmemora la lucha contra el VIH/sida, el cual se estableció en 1988 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y es el primer día en el mundo dedicado a la salud. El lema de este año es “Igualdad Ya” para recordar los actuales desafíos que persisten para que las personas con esta condición de salud puedan acceder a una vida libre de violencia y estigmas.